Inicialmente, se diseñó un estudio para valorar el incidente de SARS-COV-2 en la población infantil y juvenil (18 años) que practica fútbol federado, en colaboración con la Real Federación Gallega de Fútbol. Tras la evaluación favorable del Comité de Investigación Clínica de A Coruña-Ferrol, se puso en marcha en toda la Comunidad Autónoma de Galicia y se amplió a más deportes.

El estudio finalmente abarca a más de 180.000 licencias deportivas federadas (ya que se incluyeron otros deportes, además del fútbol) y de ellos, 85.500 tienen entre 4 y 17 años, lo que supone que en este estudio está presente el 27,6% de la población infanto-juvenil gallega que practica alguno de los deportes incluidos en el estudio.

Este acuerdo, entre el INIBIC-SERGAS, las federaciones deportivas y la Secretaría General para el Deporte de la Xunta de Galicia, permitirá valorar en todo momento a posibilidad de contagio de la COVID-19 a lo largo de la actividad deportiva.

Este proyecto está liderado por Rocío Seijo Bestilleiro, enfermera del CHUAC y responsable del área de investigación en Salud Poblacional y Cuidados Sanitarios del INIBIC. Como investigadores colaboradores participan Jorge Suanzes Hernández y Sonia Pértiga Díaz, de la Unidad de Apoyo a la Investigación del CHUAC-INIBIC, y miembros de la mismo área de investigación y Javier Rico Díaz, de la Secretaría General para el Deporte de la Xunta de Galicia, además de María José Pereira, jefa del Servicio de Medicina Preventiva del CHUAC. Además destacar al 'Grupo de investigación Aprendizaje y Control del movimiento humano en Actividad Física y Deporte' de la Universidad de A Coruña, en el que participan Rafael Martín Acero, Joaquín Gómez Varela y Dan Río Rodríguez.

Con la colaboración de la Secretaría General para el Deporte de la Xunta de Galicia, este estudio  también se lleva a cabo en la totalidad de las federaciones gallegas.

Hay evidencia concluyente de que la actividad física frecuente mejora sustancialmente la forma física y el estado de salud de niños y nuevos. En comparación con los niños y jóvenes inactivos, los que hacen ejercicio presentan un mejor estado cardiorrespiratorio y mayor resistencia muscular, y una mejora de su salud, menor grasa corporal, un perfil de riesgo de enfermedad cardiovascular y metabólica más favorable, una mejor salud ósea, y una menor presencia de síntomas de ansiedad y depresión. 

La limitación de la práctica deportiva como consecuencia de la pandemia, en población infantil y juvenil y, en particular, las limitaciones de la práctica deportiva federada, pueden tener importantes repercusiones en la salud física y emocional de este grupo poblacional, sin documentarse hasta el momento a incidente real del SARS-COV-2 en este ámbito.

Por su parte, el secretario general para el Deporte destacó el "trabajo constante, minucioso, coordinado y consensuado en todo momento con todo el tejido deportivo gallego" orientado hacia gestión de la pandemia desde el ámbito de la actividad física. En este sentido recordó que las medidas implantadas con responsabilidad por la Xunta de Galicia desde lo inicio de la crisis contaron con tres herramientas imprescindibles como los los protocolos, los tests y la máscara. Los protocolos ordenan, los tests detectan y la máscara, protege, y este estudio presentado hoy confirma que las medidas llevadas a cabo fueron las oportunas", sentenció.

Con los datos de los que se dispone hasta este momento, se puede afirmar que la incidencia de la enfermedad por la COVID-19 es inferior en el deporte federado en los mismos rangos de edad y en ambos sexos que la población general. Además es mismo inferior en aquellos rangos de edad en los que se realizan tests de cribado cada 14 días al 100% de los deportistas ya en la fase de entrenamiento. Los brotes detectados apenas afectan al 0,2% de los equipos. Estos datos ponen de manifiesto la seguridad de los protocolos y el buen rastreo en la comunidad que lleva a cabo el SERGAS.

SALUDOS DEL GABINETE DE COMUNICACIÓN

DEL ÁREA SANITARIA DE A CORUÑA Y CEE